RESUMEN
El lobo (Canis lupus) fue la primera especie que dio origen a una población doméstica, y su distribución se mantuvo durante la última Edad de Hielo, cuando muchas otras especies de grandes mamíferos se extinguieron. Sin embargo, se sabe poco sobre la historia y la posible extinción de las poblaciones de lobos del pasado o sobre cuándo y dónde vivieron los progenitores del perro actual (Canis familiaris). En este estudio, se analizaron 72 genomas de lobos de los últimos 100.000 años procedentes de Europa, Siberia y Norteamérica. Se ha descubierto que las poblaciones de lobos estaban muy conectadas durante el Pleistoceno tardío, con niveles de diferenciación de un orden de magnitud inferior a los actuales. Esta conectividad poblacional permitió detectar la selección natural a lo largo de la serie temporal, incluida la rápida fijación de mutaciones en el gen IFT8840.000 producidas 30.000 años atrás. Los autores demuestran que, en general, los perros están más emparentados con los antiguos lobos de Eurasia oriental que con los de Eurasia occidental, lo que sugiere un proceso de domesticación en el este. Sin embargo, también se ha descubierto que los perros de Oriente Próximo y África derivan hasta la mitad de su ascendencia de una población distinta relacionada con los lobos modernos del suroeste de Eurasia, lo que refleja un proceso de domesticación independiente o una mezcla con lobos locales. Ninguno de los genomas de lobo analizados coincide directamente con ninguno de estos ancestros caninos, lo que significa que aún no se han localizado las poblaciones progenitoras exactas.
Los autores y otros datos del artículo:
Bergstrom, A., D. W. G. Stanton, U. H. Taron, L. Frantz, M. H. S. Sinding, E. Ersmark, S. Pfrengle, M. Cassatt-Johnstone, O. Lebrasseur, L. Girdland-Flink, D. M. Fernandes, M. Ollivier, L. Speidel, S. Gopalakrishnan, M. V. Westbury, J. Ramos-Madrigal, T. R. Feuerborn, E. Reiter, J. Gretzinger, S. C. Munzel, P. Swali, N. J. Conard, C. Caroe, J. Haile, A. Linderholm, S. Androsov, I. Barnes, C. Baumann, N. Benecke, H. Bocherens, S. Brace, R. F. Carden, D. G. Drucker, S. Fedorov, M. Gasparik, M. Germonpre, S. Grigoriev, P. Groves, S. T. Hertwig, V. V. Ivanova, L. Janssens, R. P. Jennings, A. K. Kasparov, I. V. Kirillova, I. Kurmaniyazov, Y. V. Kuzmin, P. A. Kosintsev, M. Laznickova-Galetova, C. Leduc, P. Nikolskiy, M. Nussbaumer, C. O’Drisceoil, L. Orlando, A. Outram, E. Y. Pavlova, A. R. Perri, M. Pilot, V. V. Pitulko, V. V. Plotnikov, A. V. Protopopov, A. Rehazek, M. Sablin, A. Seguin-Orlando, J. Stora, C. Verjux, V. F. Zaibert, G. Zazula, P. Crombe, A. J. Hansen, E. Willerslev, J. A. Leonard, A. Gotherstrom, R. Pinhasi, V. J. Schuenemann, M. Hofreiter, M. T. P. Gilbert, B. Shapiro, G. Larson, J. Krause, L. Dalen and P. Skoglund (2022). «Grey wolf genomic history reveals a dual ancestry of dogs”. Nature 607 (7918): 313-+.
La revista Nature tuvo un factor de impacto en el año 2021 de 69,504 (Web of Science, 2022).
| Categoría de la revista | Total de revistas | Clasificación de la revista | Cuartil |
| Ciencias multidisciplinares | 73 | 1 | Q1 |
REFERENCIAS
Web of Science (2022). Consultado el 17 de Octubre de 2022. https://www.webofscience.com/wos/woscc/summary/0e7a850e-b4a8-4e23-9661-02b4246625ca-56a1b3f0/relevance/1